4ª de San Isidro en Madrid. Gonzalo Caballero lo tiene todo, lo dio todo y le robaron la Puerta Grande
Madrid. Plaza de Las Ventas. Lunes 11 de mayo de 2015. Cuarta de feria. Tarde soleada y muy calurosa con dos tercios de entrada.Seis novillos de El Parralejo, muy bien presentados y de buen juego en líneas generales. Noble aunque a peor el primero. Excelente el segundo. Manejable y blando el tercero. Sin clase alguna el cuarto. Noble a menos en brío el quinto. Bravucón y noble el sexto.
Gonzalo Caballero (blanco y plata): Buena estocada, petición absurdamente denegada de oreja, negándose a dar la vuelta al ruedo. Estocada entrando sin muleta resultando revolcado y dos descabellos, aviso y oreja de enorme valor pese a la protestas de los energúmenos.
Fernando Rey (marfil y oro): Pinchazo y estocada, ovación. Estocada bien ejecutada, aviso y ovación.
Francisco José Espada (prusia y oro): Estocada baja trasera, silencio. Pinchazo y estocada, aviso y silencio.
Ayer había un favorito y no solo sobre el papel, sino por sus espléndidas realidades triunfales debidamente contrastadas por las muy solventes opiniones de cuantos especialistas le han seguido. Para mí, su presencia en el primer cartel novilleril de la feria isidríl, fue una esperanzadora novedad. Esperé, pues, a coincidir con cuantos han escrito y hablado maravillas de Gonzalo Caballero. Deseando despejar la incógnita, acudí a la plaza ocupando localidad muy muy baja de sombra por invitación expresa de mi gran y antiguo amigo mexicano de Guadalajara, José Luís Baruqui, hermano menor del gran Paco que este año anda viniendo tarde por lo mucho que está viajando en plan placer desde su ciudad natal a New York, crucero hasta Londres, Paris, Bruselas, Praga, Buda Pest, Roma, Madrid al fin… para incorporarse a la feria de la que nunca faltó desde sus inicios hasta sus finales hace más de 40 años… Muy buen viaje, querido Paco, pero por este gozoso retraso, te estás perdiendo un buen e interesante inicio del ciclo… Seguro que estás siguiendo el devenir de ésta en la que estamos, gracias a la maravilla de internet. Pero quiero trasladarte la especial atención – a todos nuestros lectores que también incluyen a no pocos profesionales del toreo y más concretamente del empresariado – sobre lo que deberían suponer las magníficas actuaciones que antier tuvieron en Las Ventas Eugenio de Mora y Morenito de Aranda, que ni muchísimo menos fueron casuales sino ratificadas una vez más y por todo lo alto. ¿No sería de agradecer a las empresas que contrataran a ambos al menos en una actuación por cabeza en las próximas ferias hasta que acabe la temporada? ¿No sería también beneficioso para la afición en general que, en vez de seguir contratando al o a los que vienen petardeado desde mediada la pasada campaña y en lo que llevamos de la presente, lo hagan con el de Mora de Toledo y el de Aranda de Duero? Pues eso.
Veamos ahora lo qué pasó ayer con la novillada:
Así se tiró a matar Gonzalo Caballero para quitar la razón a los del 7 y al presidente que quisieron amargarle su extraordinaria tarde
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Negro, alto, largo, distraído de salida y trotón el primer novillo bien presentado. Sufrió un volantín sal salir de unos de los fáciles lances en el recibo de Gonzalo Caballero. Al relance tomó el primer puyazo, tapándole la salida y perdiendo las manos al salir. Se defendió en el segundo. Esperó en banderillas. La facilidad y la naturalidad de Gonzalo fueron los denominadores comunes de cuanto le hizo al novillo con la muleta. Con ambas manos, en lo de pecho, en las trincheras, en los adornos, en el ir al toro y salir de cada ronda, mostró ser un superdotado. Pese a que el novillo fue a peor, le sobraron recursos en su saber resolver los problemas. Y, claro, para estar así, lo que hay en el fondo es mucho valor y, en consecuencia, mucha inteligencia. El limpio arrimón del final fue extraordinario. Para mi gusto, sobraron las giraldillas aunque las pegó con enorme firmeza. Y lo mató de gran estocada entrando con todas las de la ley. Inexplicablemente, le robaron la oreja. Los del 7 no habían parado de gritarle inconvenientes. Y el usía se asustó.
Creo que la primera faena no era de oreja, pero hay que respetar (y valorar) como GC se arrojó sin muleta en su 2º novillo. No entiendo los pitos, aunque posiblemente tampoco fuera de oreja la 2ª faena, pero sí su reivindicación.
Pues amigo, si usted cree que ninguna de esas dos faenas fueron de oreja, que Dios le conserve la vista…
Caballero es un novillero muy visto, que me temo no va llegar a ningun sitio y se tapa por el valor suicida. Entre que los toros no tuvieron picante y que Caballero transmite poco, la gente no pidió las orejas con fuerza. Otra cosa son los pitos de los tontos del 7, que no tienen verguenza . Buenas maneras tiene Fernando Rey, pero le falta mucho por ser alguien
Cuando uno expresa una opinion educadamente que no coincide con la del dueño de la wed este le llama ciego. Vamos, que no tengo ni idea. Esos tiempos ya pasaron, señor. Nunca mas volvere a entrar por aqui, so maleducado.
Hace usted muy bien.
Para mí en el toreo no puede faltar la emoción que emana del peligro cierto que hay en la lidia de un toro y ayer esto ocurrió por dos veces, en dos faenas , que fueron las llevadas a cabo por G. Caballero. Se le puede decir que no fueron exquisitas porque el chaval no está tocado por la mano de Dios y no va a ser un torero de duende pero indudablemente mereció la oreja en cada uno de sus novillos. Ayer dije que a los del 7 ya se le hace poco caso y hoy tengo que rectificar porque el señor presidente se acojonó, o mejor dicho, le acojonaron los del 7, como muy bien dice D. José Antonio, y no tuvo agallas para concederle la oreja que pidió la mayoría del público y que yo creo que se mereció. A parte de que el reglamento está para cumplirlo.
Yo prefiero a un torero valiente aunque sea algo tosco, produciendo momentos de emoción a uno de los del ” cuentiarte ” haciéndole monerías a las ” tontas del bote ” que suelen exigir para aburrir hasta a las ovejas en el 99 % de las tardes que torean. Bueno… que dicen que torean, pero que no torean porque para eso hace falta un TORO, cosa que ellos no soportan ni cuando vienen a Madrid.
Compruebe la pagina web, soy Jetopa y he escrito la primera reseña, a las 10,36 hs.
En absoluto he escrito la entrada de las 13,41 hs.
Eso se debe a que mi ordenador se averió…
El 7, entendido como sector “reventador” que es la manera en que me gusta llamarle, cada vez es un grupo más reducido. Pero es indudable que aún siguen ejerciendo una enorme influencia sobre el Palco. Fui abonado desde el 85 al 2005, y aparte de la merma numérica que ha experimentado, el 7 de antes reventaba a ciertas figuras. Últimamente compruebo atónito que igualmente revientan a un chaval sin tabaco como Caballero
Pues señores, yo voy a hacer de abogado del diablo. Solo he estado una vez dentro del tendido 7 de Las Ventas porque tenía curiosidad de ver como es esta gente. Lo que yo percibí es que son aficionados que van siempre a los toros, por lo que normalmente entienden bastante, conocen el reglamento y no toleran que nadie se lo salte, son muy exigentes con el ganado y también con los toreros. Esto es lo que percibí y que quieren que les diga, a mi esto no me parece tan malo. Es cierto que protestan mucho pero todo aficionado tiene derecho a aplaudir o a protestar lo que les gusta o lo que les disgusta. Yo en Valencia me he “tragado” orejas que no habría dado jamás pero las pedía la mayoría y me las he tenido que tragar. Otra cosa es que puedan ser maleducados, que algunos, no todos, pude ver que lo son, porque se puede protestar pero sin necesidad de lanzar ataques personales o desprecios al torero (en concreto fue a Ferrera pero me daba igual el que fuera) y ante lo que no me pude callar y repliqué porque yo soy así pero ras una pequeña trifulca, no llegó la sangre al río. Al acabar la corrida, tan amigos, No puedo opinar sobre si montan campañas a favor o en contra de toreros porque en solo una corrida, eso no lo pude ver. En cualquier caso, tampoco creo que sean “el demonio” de la plaza. Yo creo que son como los “ultras” de los equipos de fútbol, que adoran a sus equipos, en este caso a la Fiesta, pero que a veces se pasan en su visceralidad. Lo cierto es que picadores, banderilleros y matadores, se cuidan más en Madrid que en otras plazas de no hacer lo que no deben hacer y en gran parte, es gracias a los del 7 que están siempre con las zarpas afiladas si alguno se salta el reglamento o se toma licencias que no debe. Tal vez no sería tan malo que en todas la plazas, o por lo menos en las principales, hubiera un tendido 7 que mantuviera a raya a toreros ventajistas y a ganaderos serviles. A lo mejor así, no nos tomaban tanto el pelo en “provincias”. Y a Gonzalo Caballero yo no le habría pedido la oreja del primero, la del segundo sí, pero más que nada por los huevos que le echó porque torear, toreó poquito. Eso sí, jamás le habría pitado.
No estoy de acuerdo. Primero porque nunca se debe molestar con gritos y a veces hasta con insultos mientras los toreros están toreando. En Madrid han desaparecido totalmente las pitadas y las broncas enormes con las que antes se castigaba a toreros que habían estado muy mal una vez arrastrado el animal. Los del 7 chillan o pegan palmas de tango a coro cuando alguien corta una oreja pedida por la mayoría sin que ellos la hayan pedido tras hacer lo imposible para evitar que la concedan. Y esto influye a muchos malos y cobardes presidentes. Segundo porque si esas exigencias fueran generales, a todos los toreros, no es que fueran admisibles, pero al menos serían equitativas. Los del 7 solo molestan a las figuras que detestan per sé y a los que ellos creen que lo pueden ser. Nunca a los malos y aún menos a los de su preferencia que suelen ser malísimos o incapaces aunque tengan un buen concepto del toreo. El máximo ejemplo es Frascuelo. Un avejentado señor al que tienen preconcebida e incondicional admiración. En lo único que han cambiado para bien es en dejar de insultar, incluso muy gravemente, a algunos espectadores conocidos cuando no a algún crítico. A mi me martirizaron durante años hasta que me harté y hablé con la Policía. LLamaron al más vocinglero y le dijeron que, si continuaba insultando, le iban a obligar a ir a la comisaria todas las tardes de toros mientras se celebraran las corridas. Se asustó mucho el y dejó de insultar para siempre. Otra cuestión que demuestra su maldad es cómo dejan de gritar cuando se salen con la suya o cuando un torero al que han estado molestando durante toda la faena, pincha y pierde la oreja que había ganado y los del 7 no querían que se la dieran de ninguna manera. Además, la general satisfacción que exteriorizan tras haber reventado la actuación de un torero, sobre todo a las figuras que más odian, es intolerable. Llevar ideas preconcebidas contra quienes quieren reventar, haga lo que haga, es de pésimos aficionados. La crueldad con que tratan a algunos es absolutamente inadmisible.
Muy cierto lo que dice Vd en el comentario precedente y yo estoy por creer que a algunos de los “lideres ” de la caterva esta les tienen contratados para armar jarana contra determinados toreros. Recuerdo cuando a José Mª Manzanares padre le comenzaban a chillar e insultar cuando aun estaba haciendo el paseíllo y nada más empezar a actuar se ponían a simular que estaban leyendo el periódico dando a entender que no les interesaba su labor. En fin, que una cosa es exigir y otra muy distinta es despreciar por sistema lo que hace un torero en el ruedo. Esto es fanatismo negativo y en el 7 lo hay.
He estado en el 7 algunas veces y puedo decir que no tienen idea ni de toros ni de toreo. Una vez no dejaron torean a una gran figura y le gritaban de todo aunque a pesar de eso cortó una merecidisima oreja. Pero antes de que empezara el siguiente matador, un protegido del 7, se corrían la voz “A este le dejamos torear” y no protestaron nada, ni un espadazo atravesado. Así son. Otras veces he visto como se pasaban tan a gusto bocadillos y botellas de vino durante la corrida, lo cual provoca que algunos se emborrachan. Y como muchos perteneces a la asociación El Toro, que por cierto hace una meritoria labor, se conforman con una invitación al campo de ciertos ganaderos para no protestar la invalidez de sus toros. Porque también los toros “duros” se caen tal y como se ha demonstrado en la encerrona de Fandiño donde varios toros eran flojos y casi no hubo protestas. Reconozco que son exigentes con el reglamento y que toreros y cuadrillas temen al 7, pero esto no quiere decir que el 7 se haya ganado su respeto ni el del resto de los aficionados.
Como dije antes, yo si conozco bien la plaza de Madrid. Como bien dice Don José Antonio, la dureza y las broncas de antaño se han convertido en mala Leche y gravisimos insultos. Puedo admitir planteamientos que difieran de los míos, nadie es infalible, pero jamás insultar o desear el mal a un torero por alguien que se dice aficionado. Para eso ya tenemos a los antis
Bueno, yo solo he comentado la impresión que me dio de un día que asistí al 7 en la Feria de Otoño de hace un par de años. No pude ver todo esto que comentan ustedes porque fue una sola tarde y ni siquiera toreaban figuras. Pero por supuesto, me parece fatal que increpen a cualquier torero antes de comenzar la faena y peor aún si es a otros aficionados, Y si realmente entre ellos hay mafias, ya tarda la empresa en desarticularlas. Otra cosa es que sean exigentes o que peguen broncas al acabar la faena que no todo el público tiene porque ser “clavelero”, copiando la expresión que oí decir por allí.